Domingo aburrido y yo no sé jugar cartas

Supuestamente teniamos qe salir a cocinar a casa de un amigo brasilero para poder deleitarle el sentido del gusto con un poco de gastronimía peruana, hasta qe Alexander, Paola y yo sufrimos la choteada más grande del mundo. Ya tenía el peor genio del.mundo, así que busqué amigos cercanos y menos mal que mi buen amigo Jack nos prestó sus aposentos y henos aquí ....o bueno elos ahí juango un juego que me niego aprender.

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